En el 2016 Fui diagnosticada con Espondilitis Anquilosante, una enfermedad que deterioraría mi calidad de vida.
A nivel personal, agoté todos los medios de información y negándome a un tratamiento invasivo tomé la decisión de mis cambios alimenticios y de llevar una vida más natural. Tan solo 8 meses después y acompañada de la mano de Dios y la virgen, obtuve como resultado mi sanación a la que llamo “ milagro”.
Al gozar de mi sanación prometí a Dios y a mi misma convertirme en Luz para quien la necesite y ser fuente de prevención y sanación para quien así lo busque.
Así nació el nombre de “LUZ Y SALUD”.